miércoles, 26 de agosto de 2009

El mejor cumplido de mi vida

"Eres hermosa...si fueras película serías "Ciudadano Kane"."


And she melts...

sábado, 22 de agosto de 2009

It's not your birthday anymore

There's no need to be kind to you
And the will to see you smile and belong has now gone
It's not your birthday anymore

Did you really think we meant
A
ll those syrupy, sentimental things
That we said?


(Eat me, drink me...and please, please, please...bite me)

Morrissey, "It's not your birthday anymore"

lunes, 10 de agosto de 2009

Concedido:

Voy a cerrar la boca.


sábado, 8 de agosto de 2009

yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

Ya estoy mejor.
Gracias.

jueves, 6 de agosto de 2009

PUTSSSSSSS... (o la licencia poética del desgarro y la angustia de sentir que me carga el payaso)

Neta neta, creo que hoy ma va a dar algo...siento que me les voy.
No entraré en detalles pero PUTSSSSSSSma Madre. Me lleva la ...
No encuentro filosofía que me calme...voy por un tequila y luego vemos.
¡PUTA MADREEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!!!!!
(Esta entrada parece status de facebook o twitter, me disculpo por ello, pero...¡PUTÍSIMA MADREEEEE!!!)

martes, 4 de agosto de 2009

Compañía

Ella camina con prisa. Se dirige a un lugar donde alguien la espera. Tal vez alguien que la quiere y cuenta el tiempo para verla, alegre; o tal vez sea alguien completamente indiferente a ella, que sólo desea puntualidad.

Camina mientras escucha. Cruza la calle. Llega a la esquina.

Él, un muchacho con lentes y suéter de cuadros, sale de una tienda. Carga una hermosa caja rosa, una caja de pastel en sus manos indecisas.

Se dirige a un lugar donde alguien lo espera. Un lugar y una situación donde será pertinente un pastel, o bizcochos, en una hermosa caja rosa.

Hay prisa en los pasos. Avanza y llega a la esquina.

Una mujer que escucha y un muchacho de lentes, suéter a cuadros y una hermosa caja de pastel en las manos, esperan en la esquina la tregua del tráfico que les permita continuar su trayectoria.

Cuando no hay autos cruzan. No se miran, no se conocen, no les importa; sólo caminan hacia destino.

Pero ocurre que ambos caminantes, sin notarlo, han sincronizado el ritmo de los pasos apresurados. Es un ensamble perfecto en su tiempo y su inconsciencia. Y por unos segundos andan juntos.

Dos desconocidos se acompañan sin saberlo, sin querer, y cualquiera que los viera en ese instante pensaría: se acompañan; se podría decir que son amantes o hermanos, amigos de toda la vida, compañeros. Conocen sus más íntimos secretos, se han visto llorar y saben de sus alergias, cicatrices y fracturas.

En la siguiente esquina él dobla a la izquierda y ella sigue de frente. El ensamble se rompe, sin despedida, sin atención del desprendimiento. Ahora son dos trayectorias en lugar de una.

Ambos llegan bien a su destino, con una inexplicable sensación de fragilidad que les abraza la nuca…