viernes, 26 de septiembre de 2008

Filosofía del recalentado


No te preocupes, yo tampoco quiero hablar contigo.

2 comentarios:

Ondina dijo...

jajajaja!!! me encantó :p



Oye, gracias por bautizar mi nuevo blog. Con esa patadita, espero le vaya muy bien, y si no, pues morirá como mueren las tardes, a sabiendas de que no serán las últimas.

No había pasado a escribirte porque no estaba muy de acuerdo con tus últimas entradas (de que las leí, las leí... por cierto, ¿ya vas a ser abuela o todavía no?) No lo sé... no estaba muy de acuerdo, repito. Por eso la última entrada de La Locura de estar Viva la escribí inspirándome en ti.

Te dejo un abrazo y nos seguimos leyendo.

Omar Argentino Galván dijo...

Igual debería salir de esta casa, por salud.
Si me quedo encerrado
ya no volveré al trabajo
me conozco, lo sé
aún mi alfombra esconde basuras
caeré
caeré
caeré
caeré a las sábanas duras
a las manos pegajosas
a dormir de día
a comer en platos sucios
al cáncer del rencor
a los monólogos insensatos
a las uñas sucias y mordidas
a la gastada esperanza
a pensarla
a esperarla
a esperar

y mientras tanto
el maldito teléfono
ahí
quieto.